Sobre el Relato

Un relato sobre algo que paso en el autobús volviendo a casa

Haciendo numeros

Volviendo en autobús

Era viernes y salía de clases, como cada día me esperaba un largo y aburrido viaje hasta casa, perdí el bus de siempre y tuve que esperar al siguiente. Encima solía sentarme atrás del todo, al lado de la ventana para ir escuchando música en mi mundo, pero aquel día mi asiento estaba ocupado y me tuve que conformar con el de al lado, no pintaba nada bien.

-Hey -saludé-. ¿Me puedo sentar?

Era un niñato latino, con pose de chulito que apenas soltó palabra. Solo un gesto de aprobación. Sin embargo no podía dejar de mirarlo, tenía un cuerpo joven y era muy guapo, moreno, cuerpazo.. seguro que estaría ligando con alguna.

Miré discretamente hacía su teléfono, al tiempo que él se escribía con alguien, y sentí que aquella conversación iba a ser mi pasatiempo para todo el camino.

-¿Qué tal el entreno? -le preguntaban

- ¡Me han dejado Reventado! voy a ver si llego a casa.

- Pero te dije que tal el entreno, no las duchas!

- Si yo te contará lo que hago en las duchas...

En ese momento y mientras se acomodaba el paquete, giró la cabeza y me vio babeando y espiándole la conversación. Sin embargo, lejos de molestarse, parecía que lo excitaba aun mas, y su bulto no dejaba de crecer.

Me acerqué más a él  y, como intentando que me fijara, seguía tocándose el paquete, aún con sus ojos posados en los míos, y cada vez de forma más exagerada. Aquello me puso algo cachondo, y decidí imitar sus movimientos. Recuerdo que estaba muerto de vergüenza, pero él apenas parecía nervioso.

Su cara ahora reflejaba una sonrisa preciosa, tierna, invitándome a sentarme a su lado con la mirada. Y así lo hice, sin pensarlo mucho y con un absurdo disimulo, me sente a su lado y empece a rozarle el pantalón. Poco a poco fui subiendo la mano hasta su bulto, que era enorme, hasta que no se aguanto mas y me agarro de la mano, metiéndomela dentro de su pantalón

Tenía una polla cálida, de las que gustaba tocar, y estuve tocándosela como 2 minutos, hasta que lleguemos a su parada..

Autor

Gabriel

Admin